Cómo preparar Kombucha

Cómo preparar Kombucha: Guía rápida y fácil

Introducción

¿Has sentido curiosidad sobre cómo preparar Kombucha en casa? No te preocupes si te sientes abrumado por toda la información disponible en línea. Aquí te presento una guía rápida y fácil para que puedas adentrarte en el mundo de esta deliciosa bebida probiótica de manera sencilla y motivante.

¿Qué es y para qué sirve la kombucha?

La Kombucha es una bebida probiótica que se obtiene a través de la fermentación de té y azúcar. Resulta en una bebida ligeramente efervescente, llena de beneficios para la salud. No solo es deliciosa, sino que también es una aliada en el mantenimiento de una flora intestinal saludable y en la reducción de la inflamación en el cuerpo.

¿Qué beneficios tiene la kombucha para la salud?

Los beneficios de la Kombucha son variados. Contribuye a mejorar la digestión, refuerza el sistema inmunológico y ayuda a mantener un equilibrio en la flora intestinal. Además, es una excelente fuente de antioxidantes y enzimas que promueven la salud en general. Su contenido probiótico puede ayudar a reducir síntomas de intolerancia al gluten y a fortalecer el sistema digestivo.

¿Qué contraindicaciones tiene la Kombucha?

Aunque la Kombucha tiene muchos beneficios, es importante mencionar que puede no ser adecuada para todas las personas. Aquellos con sistemas inmunológicos comprometidos o problemas de salud específicos deben consultar a un profesional antes de incorporarla a su dieta.

¿Qué es un SCOBY?

El SCOBY, o Colonia Simbiótica de Bacterias y Levaduras, es el “corazón” de la Kombucha. Es un conjunto de microorganismos que transforman el té y el azúcar en una bebida fermentada. También conocido en algunos lugares como “Hongo del Té”, aunque en realidad no es un hongo, sino un polisacárido formado por una membrana de bacterias y levaduras unidas de tal manera que asemejan una especie de hongo húmedo.

¿La Kombucha Tiene Alcohol? Descubre la Verdad detrás del Mito

Es posible que hayas escuchado que la kombucha contiene una pequeña cantidad de alcohol debido al proceso de fermentación que involucra levaduras. Sin embargo, es importante aclarar que el nivel de alcohol en la kombucha casera generalmente es muy bajo y se encuentra dentro de límites seguros para el consumo regular.

Durante la fermentación de la kombucha, las levaduras descomponen los azúcares en el té y producen dióxido de carbono y pequeñas cantidades de alcohol como subproductos. Esto es parte del proceso natural de fermentación y ocurre en muchas bebidas fermentadas, como el kéfir, el chucrut y la cerveza de jengibre.

El contenido de alcohol en la kombucha varía según varios factores, como el tiempo de fermentación, la temperatura y las condiciones del entorno. Por lo general, después de una primera fermentación de 10 a 15 días, el contenido de alcohol en la kombucha casera es inferior al 0.5%. En comparación, la mayoría de los jugos de frutas contienen una cantidad similar o incluso mayor de alcohol debido a la fermentación natural.

Para reducir aún más el contenido de alcohol en tu kombucha, puedes optar por una segunda fermentación más corta o refrigerar la bebida después de alcanzar el sabor deseado. En la segunda fermentación, si decides agregar sabores o frutas, asegúrate de controlar el proceso para evitar que el contenido de alcohol aumente en exceso.

Es importante mencionar que la kombucha comercial suele tener un contenido de alcohol más bajo que la versión casera, ya que se controla y regula cuidadosamente durante la producción para cumplir con los estándares de seguridad alimentaria.

¿Se puede preparar la kombucha en casa?

¡Absolutamente! Preparar Kombucha en casa es un proceso simple y gratificante. No te dejes intimidar por videos o publicaciones complicadas respecto a cómo preparar una Kombucha. Es muy simple, con esta guía rápida y fácil resulta entretenido y motivante.

Si has estado mirando videos en Youtube o buscando información por google, estoy casi seguro que en algún punto te has sentido un tanto abrumado/a por la cantidad de información que hay por ahí. Y te entiendo perfectamente ya que yo pasé por lo mismo hace ya varios años. Solo te diré que la primera vez que la preparas es un tanto enredoso, pero luego se vuelve algo muy rutinario y entretenido ya que te da la oportunidad de usar tu imaginación y experimentar con sabores y aromas… Te puedo asegurar que se convertirá para ti también en una saludable adicción.

Preparar Kombucha no es solo el arte de crear una bebida saludable, sino también perpetuar el uso de un elixir mágico que cambia nuestras vidas y la de nuestros seres queridos. Prepáralo siempre con respeto, devoción y agradecimiento.

Ahora viene el paso a paso y más abajo puedes encontrar una versión resumida de solo una hoja que puedes descargar, imprimir o compartir.

Paso 1: Consigue un SCOBY

El primer paso para iniciarse en el mundo de las Kombuchas, es conseguir el SCOBY. Lo puedes conseguir a través de mi página web, con un amigo o por medio de grupos en redes sociales, mercadolibre, etc. Hay muchos y es solo cosa de pedirlo.

Busca en grupos de Facebook u otras redes sociales.

El Scoby, por lo general vendrá en un medio acuoso y ácido que es la kombucha y de la cual depende para sobrevivir ya que es un organismo vivo que se alimenta de té y azúcar. También le llaman “líquido iniciador” que por lo general debiera ser alrededor del 10% del total de liquido o té a fermentar.

Cómo preparar Kombucha
Un Mega SCOBY Doby Dooo

Por el momento solo nos concentraremos en el proceso de preparación.

Paso 2: Los materiales que necesitarás

Ahora que ya tienes tu Scoby y el líquido iniciador, puedes proceder a preparar tu Kombucha, para esto necesitarás:

  • Un Frasco de vidrio de 2 o más litros, bien limpio y sanitizado.
  • Té negro ceylan orgánico de preferencia, a razón de 3 gr de té por litro de agua
  • Azúcar refinada o azúcar de caña a razón de 60 gr de azúcar por litro de agua
  • Una espátula de madera o silicona
  • Un mantel de algodón o paño de gasa doble muy limpio.
  • Un elástico (para sujetar el mantel)
  • Agua purificada sin gas. (Debe estar libre de cloro y flúor)

Si vas a hacer una segunda fermentación para agregar sabores y carbonación (burbujas), necesitarás adicionalmente:

  • Botellas de vidrio gruesas con tapa con seguro, similares a las de cerveza.
  • Un colador plástico de malla fina o de acero inoxidable (muy importante)
  • Un embudo plastico
  • paño de gasa nuevo ( o muy limpio)
  • Un elástico o clips para sujetar el paño al colador

Paso 3: Ahora si. El paso a paso

  1. Hierve medio litro de agua purificada
  2. En una olla o jarro de vidrio resistente al calor, disuelve el azúcar en el agua hervida y luego agrega el té. Puedes usar un filtro de malla, silicona o acero inoxidable. También puedes usar bolsas de té aunque no es mi opción preferida, no me dan confianza ya que pueden contener colorantes y preservantes químicos que pueden dañar la kombucha.
  3. Deja reposar por unos 10 a 15 min como máximo, si lo dejas más tiempo puede ser muy amargo. Luego revuelve y cuela las hojas de té.
  4. Deja enfriar a temperatura ambiente el té dulce en un recipiente cerrado para evitar su contaminación.
  5. Una vez que el té alcance temperatura ambiente ( 26 a 32 °C), viertelo en el jarro de vidrio sanitizado.
  6. Agrega el agua purificada a temperatura ambiente hasta alcanzar 3/4 del frasco aproximadamente, y revuelve con la espátula para mezclar.
  7. Con tus manos muy limpias, introduce el scoby y finalmente el líquido iniciador.
  8. Limpia los bordes del frasco con papel y un poco de vinagre (es opcional pero muy recomendable para evitar infecciones), luego cubre con el mantel y sujeta con el elástico para evitar que entren polvo o moscas.
  9. Deja la Kombu en un lugar fresco y seco sin mover durante 10 a 15 días dependiendo de la temperatura ambiente.
  10. Después de 10 días puedes ir probando la Kombu, si ya tiene un sabor agrio pero no avinagrado, ya está lista. Adicionalmente puedes usar una cinta para medir Ph, si el Ph de la Kombu es igual o inferior a 4, entonces está lista para beberla.
  11. Si se te pasaron los días y encuentras que la kombu está muy avinagrada, puedes rescatar el scoby y unos 200 ml del líquido para iniciar un nuevo batch y desechar el resto. Yo personalmente no lo desecho, lo embotello y guardo en el refrigerador y bebo unos 100 ml diarios en ayunas para reactivar el metabolismo y acelerar el desecho de toxinas. No es recomendable beber demasiado de este o cualquier otro vinagre ya que puede producir acidosis estomacal…. 100 ml máximo !!!

Paso 4: Segunda fermentación

Una vez que la kombu alcanza una acidez igual o inferior a 4, ya está lista para beberla y comenzar a disfrutar de sus beneficios para la salud. Por lo cual puedes proceder a embotellarla y guardarla en el refrigerador siguiendo más menos los mismos pasos que se describen a continuación.

Sin embargo, la parte más entretenida y motivante de hacer kombucha es que nos permite experimentar el proceso de saborización y carbonación, con lo cual podemos crear una bebida completamente exclusiva cada vez y probar diferentes mezclas de sabores hasta dar con una que nos haga sentir como los reyes o reinas de la kombucha y presumir con la familia y amigos.

  • Entonces, si quieres saborizar y carbonizar tu Kombucha con una segunda fermentación, este es el paso a paso:
  • Traspasa el scoby y unos 200 ml de la kombu a un frasco limpio para iniciar tu nuevo batch siguiendo las instrucciones del paso 3.
  • Lava y sanitiza las botellas y sus tapones.
  • Agrega en las botellas alguna fruta deshidratada de tu gusto, puedes usar también hierbas, jengibre, cúrcuma y cáscaras de cítricos (sin la parte blanca) en la combinación que tu imaginación y gusto decidan.
  • Si usas frutas o hierbas con bajo nivel de fructosa, agrega media cdta de azúcar dentro de cada botella. No te excedas con el azúcar ya que la idea es crear una bebida saludable baja en calorías, además, un exceso de azúcar puede provocar una fermentación demasiado rápida y puede hacer explotar las botellas.
  • Utiliza un embudo y un colador cubierto con una o dos capas de tela gasa para filtrar la kombu. Esto sirve para descartar hebras y residuos de levaduras.
  • Llena las botellas con la kombu filtrada, dejando alrededor de 1 cm de espacio en la parte superior.
  • Cierra las botellas con su tapón de goma y seguro. Si usas botellas sin seguro, utiliza un alambre como las botellas de espumantes para asegurar que la tapa de goma no salga volando con la presión.
  • Deja en reposo de 2 a 3 días dependiendo de la temperatura ambiental.
  • Verifica el nivel de carbonatación abriendo levemente la tapa, si suena el típico Zzzz de las gaseosas, ya está lista.
  • Guarda las botellas en el refrigerador.
  • Bebe no más de 500 ml al día para evitar trastornos gástricos.

Kombucha, guía rápida y fácil

Adjunto encontrarás un link a un resumen de una página que puedes imprimir o bajar a tus dispositivos móviles para tenerlos siempre a mano. No es tan completo y actualizado como este post, pero tiene toda la info que necesitas para producir tu Kombucha, dale click al link siguiente para bajarlo.

kombucha un regalo celestial

Si te gustaría leer una breve historia ficticia sobre los orígenes de la Kombucha, te recomiendo esta publicación que escribí hace mucho tiempo después de haber tenido un sueño muy lúcido sobre esta maravillosa bebida.

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